Usar correctamente el candado es tan importante para la seguridad como el tipo de candado que usas. Tu objetivo es que robar tu bici sea una tarea más larga y difícil para el ladrón.
Coloca los candados a través del cuadro y a través de las ruedas, cólocalos de forma que no haya mucho espacio para insertar una herramienta o retorcer el candado. Si tu bici tiene ruedas con cierre rápido, asegúrate de que ambas ruedas estén atadas junto al cuadro.
Si dejas tu bici candada y desatendida con frecuencia, considera cambiar los cierres rápidos de las ruedas o de la tija del sillín por un tornillo con llave Allen para que sea más difícil quitarlas.
Lleva contigo cualquier cosa pequeña como las luces, el ciclocomputador o bolsas.
¡No dejes que los ladrones te impidan disfrutar de la bici!
Los ladrones buscarán oportunidades rápidas y fáciles, con un poco de planificación y un candado decente, puedes hacer que robar tu bici no les merezca la pena. Una póliza de seguros especializada en bicis también te dará más tranquilidad.
Pregunta a tu distribuidor Shimano local por recomendaciones de candados.